De ti depende establecer las mejores interacciones para poder transmitir todo el conocimiento antes del inapelable declive de los emblemáticos monumentos que has construido y que aún hoy conservamos repartidos por todos los rincones del globo. Desde las pirámides mexicanas hasta la Esfinge de Guiza, pasando por las gloriosas ciudades de Tiahuanaco y Babilonia, solo el constructor más hábil destacará a lo largo de los siglos y obtendrá la victoria.

En este juego, tu mayor enemigo es el tiempo. Los monumentos que pondrás en juego van todos acompañados de conocimiento. Al final de cada turno, todos los monumentos deben desplazarse hacia la izquierda, decayendo poco a poco, hasta llegar al pasado, lamentando todo ese conocimiento perdido. Cuando un jugador tiene un mínimo de 14 monumentos en su pasado, la partida finaliza. ¿Resistirán tus monumentos los rigores del paso del tiempo? ¡Demuestra a tus oponentes que eres el digno representante de tu legado!